Absorto en la quietud
mi cuerpo
explora los límites
de una mente en movimiento.
Conversa la presencia
con un espacio mudo
DISOCIANDO el ruido de la ausencia.
Arraigo desconocido
ante este automatismo
que me arrastra al olvido
inconsciente y desapercibido
Lucha silenciosa
mi luz conmigo
Sombra cómplice
reflejo líquido
Siempre vuelvo
siempre mío
La mente que habito
templo desconocido
Mapas de regreso a mí mismo
Vertiginoso abismo
Valioso equilibrio
Caída libre
Tiempo inservible
Agotado el pasado
me encuentro
cara a cara
con mi ser infinito
ÁLVARO PIEDELOBO